EE.UU. exige a México frenar contaminación del Pacífico; Sheinbaum responde con acuerdos bilaterales

PorYael Díaz

23 de abril de 2025 , ,

En el marco del Día de la Tierra, el gobierno de Estados Unidos volvió a intensificar su presión sobre México para detener el flujo constante de aguas residuales sin tratar que cruzan desde Tijuana hacia el sur de California, contaminando el Océano Pacífico y afectando la salud pública, la vida marina y las operaciones militares en la región.

Durante una visita oficial el 22 de abril, Lee Zeldin, administrador de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), recorrió la planta de tratamiento en San Diego y sobrevoló el Río Tijuana, uno de los principales focos de la crisis ambiental binacional.

“California ya no puede seguir esperando. Esta situación pone en riesgo la salud de los residentes y de nuestras tropas. México debe actuar de inmediato”, advirtió Zeldin.

El funcionario adelantó que la EPA presentará a México una lista de proyectos prioritarios que podrían contener esta crisis que, según cifras oficiales, ha vertido miles de millones de litros de aguas contaminadas al océano desde 2018. A pesar de una inversión estadounidense de más de 653 millones de dólares, los avances han sido limitados debido a retrasos en la ejecución del lado mexicano.


📍 Respuesta de Sheinbaum: cooperación, no confrontación

Ante las críticas, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que se ha alcanzado un acuerdo con la EPA y la Secretaría de Medio Ambiente, liderada por Alicia Bárcena, para coordinar acciones conjuntas.

“Se trata de una responsabilidad compartida. México ya concluyó la planta de San Antonio de Los Buenos, que trata 800 litros por segundo con una inversión de 38 millones de dólares, pero reconocemos que se requiere hacer más”, explicó Sheinbaum.

El plan incluye que Estados Unidos finalice la rehabilitación de la Planta Internacional de Tratamiento de Aguas Residuales en San Ysidro, la cual permitiría mejorar sustancialmente el manejo de aguas negras en la región fronteriza.


🧪 Riesgos sanitarios y consecuencias militares

Uno de los puntos más críticos ha sido la denuncia del senador estadounidense Tim Sheehy, quien envió una carta a la mandataria mexicana exigiendo el cese inmediato del vertido de aguas contaminadas. Sheehy calificó el fenómeno como una “marea tóxica” que afecta desde hace décadas al personal militar estadounidense.

“Esta contaminación está enfermando a nuestras tropas, especialmente a los Navy SEALs que entrenan en la costa. Está impactando nuestra preparación militar”, denunció.

Desde 2021, la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) ha destinado más de 34 millones de dólares para reparaciones de emergencia en la planta de San Diego, sin embargo, ambos países reconocen que se requieren acciones estructurales a largo plazo para contener la contaminación transfronteriza.

El caso del Río Tijuana se ha convertido en uno de los desafíos ambientales más complejos en la relación México–Estados Unidos. Si bien existen avances técnicos, la presión diplomática aumenta y la ciudadanía, tanto mexicana como estadounidense, exige soluciones sostenibles, rápidas y coordinadas.

El seguimiento a los acuerdos anunciados marcará el ritmo de una relación bilateral donde la salud pública, la soberanía ambiental y la cooperación internacional estarán a prueba.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *