La política de salud pública del Gobierno Federal sigue un curso definido con el objetivo de garantizar la cobertura universal y el bienestar de la población. A pesar de los rumores recientes sobre un supuesto recorte de 113 mil millones de pesos al sector salud, desde el Congreso de la Unión han desmentido tales afirmaciones, asegurando que no solo no existe tal disminución, sino que, por el contrario, se ha llevado a cabo una reorientación de los recursos hacia una estrategia centrada en la prevención y la atención primaria.
@drpedrozenteno El Presupuesto para el Sector Salud en el 2025 no se reduce.
♬ sonido original – Dr. Pedro Zenteno
El presidente de la Comisión de Salud en el Congreso de la Unión, Pedro Mario Zenteno Santaella, explicó en entrevista para En Resumen que la reasignación de recursos ha permitido un aumento del 24% en el presupuesto destinado a los programas de IMSS-Bienestar, lo que equivale a un incremento de 37 mil millones de pesos. Esta medida beneficiará a una población de aproximadamente 8 millones de mexicanos sin seguridad social, quienes ahora serán atendidos bajo este esquema.
Incrementos presupuestales en el sector salud
La Secretaría de Salud (Ramo 12) experimentó un incremento presupuestal del 2.5%, consolidando su rol como entidad rectora de las políticas de salud en el ámbito federal. Además, el IMSS Ordinario y el ISSSTE también recibirán aumentos presupuestales del 5% y 6%, respectivamente, en comparación con el año anterior.
Hacia un sistema de salud integral y preventivo
El diputado de Morena subrayó que el sistema de salud mexicano se encontraba fragmentado y descentralizado, lo que dificultaba la implementación de políticas públicas eficaces. “Cada estado tenía la autonomía para diseñar su propio sistema de salud, lo que generaba desigualdad y falta de coherencia en la atención. Con el fortalecimiento de la atención primaria y el impulso a la prevención de enfermedades, el gobierno federal busca corregir estas fallas y orientar los recursos hacia la salud preventiva, como lo estipula la Organización Mundial de la Salud desde los años setenta”, indicó.
En este sentido, destacó la importancia de la promoción de hábitos saludables y el control de enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes, la hipertensión y la obesidad. De acuerdo con Zenteno Santaella, se estima que en México existen 14 millones de personas con diabetes y el 40% de la población padece hipertensión, condiciones que en muchos casos podrían haberse prevenido con políticas más orientadas a la educación en salud y la prevención.
Modelo de atención centrado en los ciudadanos
El legislador federal aseguró que el actual modelo de atención se aleja de la lógica mercantilista de años anteriores, cuando el sistema de salud se veía como un negocio, con un enfoque predominantemente curativo. En cambio, el gobierno busca que la salud sea considerada un derecho humano, un bien que debe ser garantizado por el Estado. El modelo que se está implementando está diseñado para atender las necesidades de la población de manera integral, con especial atención a los grupos vulnerables, como los adultos mayores. “A este grupo se les ofrece un programa de atención médica a domicilio, con un presupuesto de 200 millones de pesos, destinado a mejorar la calidad de vida de los adultos mayores que, por sus condiciones físicas, no pueden acudir a los centros de salud”.
Agregó que la estrategia de salud se complementa con una nueva distribución del presupuesto nacional, que prioriza la salud dentro del conjunto de políticas públicas del país. Con una asignación de 2.2 billones de pesos al sector salud, el gobierno asegura que el Estado será el encargado de definir la política pública en salud, con un modelo único e incluyente.
Desafíos del sistema y lucha contra la corrupción
Zenteno Santaella hizo referencia a los problemas heredados del pasado, incluyendo los altos niveles de corrupción que aún persisten en algunas áreas del sistema de salud. Destacó que la fragmentación y descentralización del sistema fueron factores que propiciaron prácticas corruptas. La propuesta actual busca consolidar un modelo único de salud que no solo garantice la atención universal, sino que también elimine los incentivos para la corrupción y la ineficiencia.
“El fortalecimiento de la transparencia y el control en la gestión de los recursos es uno de los pilares de la reforma actual, garantizando que los recursos destinados a la salud sean utilizados de manera eficaz y con total rendición de cuentas”, concluyó.
Un sistema de salud universal y gratuito
El legislador federal indicó que el proyecto de salud de la presidenta Claudia Sheinbaum tiene como objetivo crear un sistema integral que brinde cobertura a todos los mexicanos, sin importar su estatus laboral o afiliación a alguna institución de seguridad social. Aseguró que este sistema garantizará la atención médica de calidad de manera gratuita para todos los ciudadanos, fortaleciendo así los principios de justicia social y equidad.
Destacó que uno de los mayores logros de este sistema será la integración de diversas instituciones de salud bajo un único sistema, lo que permitirá una mayor cobertura y eficiencia en la atención. Por ejemplo, los maestros podrán ser atendidos en las clínicas del IMSS Ordinario, incluso si no están afiliados al ISSSTE, gracias a un sistema de intercambio de servicios interinstitucionales.
El reto de la atención humanizada
El diputado Zenteno Santaella enfatizó que el nuevo modelo de salud también busca promover un cambio cultural en la atención médica, centrado en el respeto y la dignidad del paciente. Afirmó que, si bien la infraestructura y los recursos humanos son fundamentales para el éxito de este sistema, la actitud del personal de salud es igualmente crucial.
“El trato al paciente debe ser de calidad, con calidez y profesionalismo, para garantizar que el sistema no solo sea efectivo, sino también humano. Este enfoque humanizado debe ser un principio rector para todos los servidores públicos involucrados en el sector salud, desde médicos hasta administrativos, ya que el verdadero reto es garantizar que el sistema de salud no solo brinde atención médica, sino también un trato digno a las personas que requieren de este servicio”, concluyó.