La automedicación se define como el consumo de medicamento sin la intervención del profesional de la salud.
A lo largo del tiempo la automedicación ha variado, considerando solo los medicamentos de uso sin receta o también medicamentos de prescripción de receta según los pacientes o antecedentes de tratamientos anteriores e incluso “remedios caseros”.
Según fuentes de Pfizer el 70% de la población suele tener reacciones adversas al propósito del uso del medicamento.
La automedicación puede presentar sintomatologías propias de la alergia entre ellas: dolor de cabeza, somnolencia, náuseas, diarrea, urticaria, entre otras.
Existen riesgos y ventajas, sin embargo, en estadística, los riesgos tienen una tendencia elevada ya que no se considera la supervisión del especialista.
Y usted, ¿a qué es alérgico?